De formación Arquitecto UC, se ha dedicado a la escultura de forma autodidacta, y a partir del año 2013 decide abocarse de forma integra al arte escultórico, su verdadera pasión.
Rescata de la arquitectura el don de fabricar lugares con algún propósito humano. Y le otorga a la escultura el don de fabricar emociones, en aquellos mismos lugares. Su fin es aportar al arte público, a las urbes y paisajes; plazas y jardines privados, para acercar el hormigón y la tridimensión matérica a los actos del hombre en todas sus escalas.
En Junio de este año, obtiene el Primer lugar del Concurso de Arte Público convocado por el Ministerio de Obras Públicas (MOP) para la intervención artística en el aeropuerto El Loa de Calama, con su obra “Trama del Tiempo”, una escultura de nueve metros de altura en hormigón armado pigmentado.